Vasos biodegradables

Vasos biodegradables

Vivimos en un mundo en el que la tendencia actual es conseguir la sostenibilidad, reducir el impacto del hombre en el planeta para que las futuras generaciones nos los puedan agradecer. Aparecen nuevas soluciones que permiten hacer de este objetivo una realidad y, entre las más destacadas, los envases biodegradables nos ayudan mucho más de lo que nos pensamos.

Los vasos son imprescindibles en nuestro día a día, pero en el hogar podemos apañarnos con los mismos todos los días. Esto es algo que no se puede hacer en hostelería y restauración, no si se quiere evitar ese impacto en el medio ambiente. Por ello, los vasos biodegradables se presentan como una brillante alternativa por la que cada vez más negocios hosteleros se decantan.

En las siguientes líneas vamos a estudiar con todo detalle sus características:

Un poco de historia sobre los productos biodegradables

Para entender lo beneficiosos que son, tenemos que hacer un viaje en el tiempo al siglo XX. En aquel momento aparecen los vasos de plástico con el objetivo principal de facilitar nuestra vida.

Y es que, en lugar de tener que lavar los platos de cristal, era tan sencillo como tirar ese vaso de plástico y usar uno nuevo. ¿Cuál era el problema de este procedimiento? La acumulación de los vasos de plástico. Empezaron a producirse en masa y esto ha terminado pasando factura al medio ambiente.

Recordemos que el plástico no es un material que se descomponga por sí mismo, de forma orgánica, si no que requiere de muchísimo tiempo para que ocurra.

La industria de la petroquímica ha decidido cambiar las cosas y empezaron a desarrollar lo que hoy día conocemos como vasos biodegradables.

¿Qué ventajas presentan los vasos biodegradables frente a los vasos de plástico?

Para entender la ventaja principal, es importante estudiar sobre la composición de ambos elementos.

Los vasos de plástico se fabrican partiendo de polímeros sintéticos. Estos proceden del petróleo y del carbón. Tienen un largo tiempo de vida útil, y es que pueden tardar en descomponerse entre 100-400 años. Esto hace que:

-Se acumulen, provocando que obstruyan las alcantarillas.

-Su acumulación también eleva la contaminación de los océanos y de los ríos.

-Están relacionados con el incremento del efecto invernadero y con el cambio climático.

-Afectan a la calidad del agua, haciendo que esta descienda de una forma importante. Por ello, provocará todo tipo de riesgos para las criaturas marinas, así como para las personas.

Los vasos biodegradables también se han diseñado a base de polímeros, pero, a diferencia de los vasos de plástico, estamos hablando de polímeros de origen natural (que derivan de materiales como el caucho natural, la celulosa, el almidón, las proteínas, y un largo etcétera).

Cómo su tiempo de vida útil es menor, no se acumulan, evitando que contaminen los océanos, que obstruyan las alcantarillas, que se incremente el efecto invernadero, que haya cambios negativos en el cambio climático…

Composición de los vasos biodegradables

Además de los polímeros naturales que ya hemos mencionado, los vasos biodegradables se componen de otros como el plátano, la yuca, celulosa, legumbres, aceite de soja, fécula de patata, poliácidos y polisacáridos.

Cuando estos elementos terminan su ciclo de vida útil, se descompondrán y no necesitarán de tanto tiempo como los polímeros sintéticos. Una vez que lo hagan, el material resultante resulta muy positivo para el ambiente, ya que servirá para que las plantas puedan desarrollarse al ser abono de origen orgánico.

Hay algunos polímeros que se utilizan más que otros por sus interesantes propiedades: el más común que nos encontramos es el almidón (se suele extraer del maíz, trigo o de la fécula de la patata). Se considera un recurso inagotable, se puede reciclar, su tiempo de vida útil es reducido y, además, potencia el rendimiento de las áreas agrícolas al descomponerse.

Esta composición no solo nos ayuda a respetar más el planeta, sino que es un material mucho más económico, por lo que puede contribuir al ahorro de costes de producción.

¿Es lo mismo un envase biodegradable que un envase compostable?

Es bastante común confundir estos 2 términos, sobre todo cuando descubrimos que todos los plásticos compostables son biodegradables, pero no a la inversa. Vamos a estudiar las diferencias para que nos quede claro el concepto:

Envases compostables: Tan solo se puede decir que un envase es compostable si cuando se descompone se convierte en compost (en otras palabras, en abono orgánico). Otra de las ventajas que identifica a este tipo de envase es su rapidez de degradación: es mucho más ágil que en otros materiales debido a que la acción microbiológica funciona a un tiempo más rápido. No tardará mucho en descomponerse, y lo hará evitando dejar productos tóxicos o visibles.

Hay una forma de comprobar si un envase es o no compostable, y es a través de la norma EN 13432. Esta norma establece que el material tiene que degradarse, al menos, un 90% en un plazo de tiempo de 6 meses (y el ambiente en el que lo debe hacer debe tener una alta proporción de CO2).

Envases biodegradables: En cambio, un envase será biodegradable cuando se ha fabricado con materias primas orgánicas que derivan de fuentes renovables (como los que hemos visto). Cuando se eliminan como residuos, estos se degradarán, y terminarán convirtiéndose en biomasa y nutrientes. Este proceso puede tardar algunos años en producirse, y en él no interfiere el hombre para nada. Por mucho tiempo que puedan tardar en descomponerse, siempre será menor que lo que tardan los envases de plástico.

Diferencias entre vasos biodegrádales, bioplásticos y Oxi Biodegradable

En el momento en el que un negocio hostelero o de restauración decide comprar vasos biodegradables, se encontrará con una larga serie de términos que pueden complicar su elección. Ahora que ya sabeos que los envases biodegradables y los compostables no son lo mismos, vamos a ver qué diferencias hay entre estos 3 términos.

Vasos bioplásticos

El material bioplástico se caracteriza por tener las mismas propiedades del plástico normal. Sin embargo, la materia prima que se utiliza para su creación son fuentes renovables, como es el caso del almidón de soja, maíz, caña de azúcar, patata, entre otros tantos.

Aquí es dónde podemos encontrar la confusión más importante: aunque la fuente del envase bioplástico sea de origen natural, esto no quiere decir que sea biodegradable ni mucho menos (aunque lo normal es que se pueda reciclar).

El gasto energético que entraña su producción y del reciclaje es muy similar al asociado con el del plástico convencional. El nivel de contaminación que emite al medio es prácticamente el mismo.

Vasos de plástico Oxi Biodegradable

Los vasos y envases de plástico Oxi Biodegradable son muy similares al plástico normal, con la particularidad de que se le agrega un determinado aditivo que tiene la función de agilizar el proceso normal de la degradación. Lo que se consigue con este aditivo es que el plástico, en lugar de requerir de años para degradarse, necesitará de unos meses o, incluso, de algunas semanas.

Pero no todo es tan positivo: existen algunos estudios que han determinado que en el proceso de degradación se emiten algunos elementos que pueden no ser inofensivos, por lo que no son la mejor solución que digamos. Al hacerlo, se irán dividiendo en pequeños fragmentos que elevan la contaminación microplástica, y esta es una de las contaminaciones más graves del océano, así como de los diferentes ecosistemas.

No es tan fácil de reciclarlos y no tienen un tiempo de vida útil elevado.

En comparación con los vasos de bioplásticos y los oxi biodegradables, los plásticos biodegradables se confeccionan con polímeros naturales que permiten una descomposición rápida (siempre y cuando las condiciones de luz, humedad, oxígeno y calor sean las adecuadas). Este tipo de plástico no se suele reciclar, por lo que lo más habitual es que tan solo se les dé un uso.

Ventajas de los vasos biodegradables

Aunque a lo largo de los apartados anteriores hemos visto alguna de las ventajas por excelencia de los vasos biodegradables, y de los envases biodegradables en general, en las siguientes líneas vamos a detallar algunas de las más importantes:

1) Ayudan a que el planeta se mantenga sano

Cada vez estamos más concienciados de lo importante que es mantener el planeta en las mejores condiciones. La Tierra está pidiendo ayuda, y el hombre no solo no se la ha dado en las últimas décadas, si no que ha agravado la situación a niveles casi irreversibles.

Los vasos biodegradables están compuestos por polímeros naturales que permiten recuperar un ciclo de vida lógico, estable, al mismo tiempo permite que el planeta se mantenga con buena salud.

2) No tienen un impacto negativo para el paisaje

Cualquier paisaje puede verse estéticamente afectado por una simple bolsa de plástico o por una pila. Esto no ocurrirá si estamos hablando de envases biodegradables. Ya hemos visto que son materiales que tienen asociados un tiempo de vida mucho más corto.

Al degradarse con mayor facilidad no será ningún problema para el paisaje. Además, se pueden reciclar de manera sencilla.

Como están formados por polímeros naturales, los microorganismos los pueden conseguir y así se sigue el ciclo vital de la vida.

 3) No emiten residuos al medio ambiente

Otra de las ventajas de que se descompongan tan rápidamente es que no generarán ningún tipo de residuos. De la misma forma, tampoco expulsarán gases tóxicos que podrían agravar el efecto invernadero.

 4) Reduce la saturación de los vertederos

Es impensable la cantidad de basura que el ser humano genera en cada día de su vida. Esta basura tan solo puede ir a parar a un sitio, y es a los vertederos que hay repartidos a lo largo del mundo.

El planeta es muy grande, sí, pero ya se trabaja en la hipótesis de que en algún momento nos vamos a quedar sin espacio. Por ello, los vasos biodegradables buscan que se aproveche al máximo el espacio. Se fabrican para que sean lo más parecidos posible a los vasos convencionales, para que podamos sustituirlos y que no nos suponga ningún problema hacerlo.

 5) Ayudan a ahorrar

Muchas personas o empresas de hostelería y restauración son algo reacias a cambiarse a los vasos biodegradables, alegando que les va a costar un dinero que no tienen. El contrario de lo que nos pensamos, lo cierto es que estos envases biodegradables son mucho más baratos que los que no lo son.

Y es que los materiales naturales son muy económicos (ahora todavía más, debido a la gran demanda que hay sobre ellos). El hecho de agregarles productos químicos tan solo disparará el precio final.

¿Qué ocurrirá si no utilizamos materiales biodegradables?

Quizá hace unos años teníamos opción, pero ahora no la tenemos. Los efectos de haber utilizado durante tanto tiempo materiales no biodegradables los estamos viendo todos los días.

¿Sabías que un vaso de cristal puede tardar hasta 4000 años en desaparecer? ¿Qué un vaso de plástico podría estar en este mundo unos 150 años? ¿Qué una simple lata de conservas podría sobrevivir al paso del tiempo durante 450 años (de ahí su nombre, ya que se conservan muy bien)?

Y estos son algunos de los elementos que, aunque tarden tiempo, se descomponen. Algunas pilas no tan siquiera lo hacen.

Si no empezamos desde ya a hacer el cambio por envases biodegradables, la basura se acumulará hasta a un punto en el que no demos abasto, y tendremos más calentamiento global, mayor contaminación y un empobrecimiento de nuestra salud y la de nuestros animales.

Razones para usar vasos biodegradables

Cada año que pasa se genera una cantidad de entre 7.000-10.000 toneladas de basura a lo largo de todo el mundo. 3 de cada 10 residuos permanecer sin tratarse o sin ser recolectado de ninguna manera. Al usar vasos biodegradables:

-Ponemos nuestro pequeño granito de arena en la reducción de la contaminación del planeta: Es una de esas pequeñas tareas que podemos hacer en nuestro día a día, y que lo pueden cambiar todo. Si se termina convirtiendo en la tendencia que se espera, podremos devolverle a la Tierra un poco de lo que nos ha dado.

-Reduciremos el calentamiento global: Los expertos de la ONU ya advertían en el año 2018 que 2020 sería el año límite para luchar contra el calentamiento global. Si la tendencia sigue su curso, las capas de hielo se seguirán derritiendo, los océanos aumentarán una docena de metros, morirán más arrecifes de coral y, en definitiva, nos cargaremos nuestro planeta de forma irreversible. Acciones como la reducción de plástico pueden ser un buen punto departida.

-Reforzaremos nuestra salud y la de los animales: El plástico es un contaminante natural que afecta gravemente a nuestra salud. Como veremos a continuación, es posible que llegue a tu plato y no te des ni cuenta. Reduciendo el consumo de plástico nos ayudará a tener una salud imbatible.

Prohibición de usar plásticos de un solo uso a partir de 2021

La Unión Europea se ha puesto muy seria para reducir la contaminación. Desde el Parlamento Europeo se ha aprobado que los productos plásticos que tan solo tengan un solo uso se eliminen del mercado a partir del 2021. Estamos hablando de artículos como cubiertos (cucharas, cuchillos, tenedores, palillos), pajitas, plásticos, vasos, bastoncillos de algodón, palitos de plástico (aquellos usados para mantener globos), plásticos oxodegradantes, entre otros). 

Y es que, según los datos que se manejan, alrededor de un 80% de la basura que se recupera del mar es de plástico. El 70% de los mismos corresponden a productos que están cubiertos con la legislación actual.

Un estudio llevado a cabo por la organización Orb Media determinó que más del 80% del agua del grifo tiene algunas partículas de plástico. En otras palabras, que estamos bebiendo plástico y no nos damos cuenta.

Como ya hemos visto, el problema que tienen dichos productos es su lenta descomposición. Debido a ella, el plástico se va acumulando de manera progresiva en el mar y en la playa, a lo largo de todo el mundo. Este material es un peligro para las especies marinas (como focas, tortugas, ballenas, peces, mariscos) o hasta para las aves.

Además, conviene recordar que una pequeña parte de este plástico termina llegando a nuestros hogares.

Se establecen fuertes multas para todas aquellas entidades para que, cuando llegue dicha fecha, no se hagan eco del compromiso.

Pero todavía hay más: para el año 2029 se pretende recuperar hasta el 90% de las botellas. Se prevé que para el año 2025 se recoja el 25% del plástico de las botellas y de un 30% para 2030.

¿Cómo se adaptará el sector hostelero a esta nueva legislación?

Aunque todavía queda un año para que entre en vigor, los negocios hosteleros están viendo de qué manera adaptarse, ya que el reto que tienen en mente no es nada sencillo.

Estos son algunos de los elementos clave que tendrán que cambiar los restaurantes para adaptarse al nuevo marco legal:

Cambios en los envases de comida: Las empresas tendrán que sustituir los envases de plástico por envases biodegradables. Un buen ejemplo lo encontramos en los platos biodegradables que muchas empresas ya están implementando.

Ticket online: Día a día se imprimen millones de tickets, y la mayoría de ellos acaban en la basura. El problema de estos tickets es que tienen Bisfenol A, un químico que también contamina. Para evitar este problema, la solución es enviar el ticket por e-mail. Quizá, el cliente se sienta un poco reacio al principio para elegirlo, pero la cosa cambia en cuanto se da cuenta de que le permite tener el ticket siempre disponible.

Manteles: También tendrán que buscar una manera de sustituir los clásicos manteles de plástico, por otros menos contaminantes como los de tela o de papel.

Pajitas: En estos últimos años hemos visto muchas campañas que han perseguido las pajitas, y con razón. Una forma de evitar las pajitas de plástico en los restaurantes es cambiarlas por otras de materiales biodegradables. Buenos ejemplos son las pajitas de maíz o las de bambú. El tiempo de reciclaje estimado para las mismas es de 1 año.

Botellas de plástico de agua: Ya conocemos el dato de lo que tarda una botella de plástico en desaparecer por completo. Por ello, es conveniente empezar a sustituir ya las botellas de agua por dispensadores o con botellas que se hayan confeccionado con otros materiales más ecológicos, como es el caso del cartón.

Aunque cada vez son más los negocios hosteleros los que confían en los vasos degradables y otros tipos de envases para su tipo de negocio, lo cierto es que estamos hablando de un sector en el que no se recicla tanto como se debería. El problema ya no es tanto del establecimiento, si no que comparte la carga con el cliente. Al fin y al cabo, la decisión del reciclaje tiene mucho que ver con la forma de actuar de cada cliente.

Un estudio llevado a cabo por Hostelería de España (que es un tipo de entidad de ámbito empresarial que se encarga de representar a bares, cafeterías, restaurantes y pubs de nuestro país), concluyó con una cifra muy significativa: tan solo 1/3 de los encuestados afirma que recicla menos de la mitad de los envases que pasan por sus manos.

Algunas Comunidades Autónomas han decidido ir un paso más allá para luchar contra el plástico de un solo uso. Un ejemplo lo encontramos en Galicia; en concreto, desde la Xunta de Galicia han creado un anteproyecto de ley que, de ser aprobado, exigiría a los restaurantes de comida a servirla en envases reutilizables en algún momento de 2020. Este proyecto también incluye a idea de prohibir las bolsas de plástico que no sean compostables, aunque esto ya entraría en vigor en el año 2021.

El futuro se centrará en prohibir cualquier tipo de residuo, aunque parece que en esta época se le ha declarado la guerra al plástico.

Ahora que ya lo sabes todo sobre los vasos biodegradables, echa un vistazo a nuestro catálogo y así podrás elegir los tipos que buscas.